Este miércoles, las diputadas de Chile Vamos, Camila Flores (RN), Paula Labra (RN) y Flor Weisse (UDI) antepusieron una querella criminal en contra del exsubsecretario Manuel Monsalve por el delito de secuestro agravado y Carolina Tohá, ministra del Interior, por obstrucción a la justicia, infracción a la Ley de Inteligencia y omisión de denuncia. Específicamente, las congresistas busca que se investiguen las responsabilidades penales y administrativas por hechos de extrema gravedad que “afectan la credibilidad” de las instituciones públicas. Ello, en el marco del denominado Caso Monsalve. En la acción judicial, las parlamentarias aseveran que los antecedentes conocidos “revisten de gravedad y deben ser investigadas exhaustivamente, porque infringen no solo normas de la Ley de Inteligencia, sino que constituyen actos que pueden haber modificado pruebas”. Siguiendo esa línea, Camila Flores indicó que solicitan que se configure el delito de secuestro agravado contra el ''exzar de la Seguridad'', “porque ha sido retenida una víctima y el producto de esa retención, precisamente, ha existido una presunción de delito de violación que se está investigando”, subrayó. En tanto, Paula Labra comentó que la querella criminal surgió luego que constaran “que hubo un pacto de silencio” entre las autoridades de Gobierno. “Estamos hablando de un exsubsecretario del Interior, una persona poderosa que utilizó sus redes propias del cargo para encubrir el caso. Por eso, con firme convicción, hemos tomado la decisión de querellarnos por secuestro agravado, porque la víctima fue retenida contra su voluntad. Monsalve debe pagar por todos sus actos, por justicia y honor a la víctima”, fustigó. De acuerdo a Flor Weisse, los hechos que se han conocido dan cuenta de un “circo romano, donde se ha hecho un guión, una trama por parte de La Moneda”. “En esta querella se suma la omisión de denuncia, toda vez que la ministra del Interior también tenía la obligación, como cualquier funcionario público, de poner y denunciar los hechos de los cuales tomó conocimiento de manera inmediata”, profundizó. Sumado a lo anterior, el texto detalla que Tohá habría mantenido comunicaciones con Monsalve en momentos críticos del proceso, lo que podría haber interferido en la calidad reservada de la investigación. Con todo, en base a lo expuesto en el documento, se deberá determinar si “este llamado realizado por la ministra Tohá a Monsalve, antes de realizarse el allanamiento, fue la alerta suficiente para que el querellado procediera al cambio del chip de su teléfono celular, constituyendo un hecho relevante en la investigación del delito de obstrucción a la investigación”.
Este lunes se dio a conocer la declaración completa de la ministra del Interior, Carolina Tohá, en el marco del Caso Monsalve, que investiga denuncias de abuso sexual y violación contra el exsubsecretario de la cartera. Según el testimonio entregado a la Fiscalía, Tohá señaló que supo de la denuncia por parte del inspector general de la PDI, Eduardo Cerna, el martes 15 de octubre, un día después de que la querella fuera ingresada. El señor Cerna me dijo que tenía una mala noticia: existía una denuncia contra el subsecretario por abuso y violación, afirmó Tohá. La ministra también explicó que la PDI, durante la investigación, detectó que el subsecretario había solicitado previamente una revisión de las cámaras del hotel, aduciendo que tenía12 horas borradas en su memoria. Según Monsalve, durante ese lapso estuvo acompañado de una funcionaria de la subsecretaría del Interior, luego de haber consumido alcohol juntos. Tras enterarse de los hechos, Tohá informó al Presidente Gabriel Boric, quien, según su relato, se mostróimpresionado y sorprendido. Fue entonces cuando el mandatario instruyó al subsecretario viajar a Concepción para discutir la situación con su familia, aunque Tohá aclaró que desconocía ese viaje hasta mucho después. Ante esto, la ministra intentó comunicarse con Monsalve el miércoles 16 de octubre, pero no logró contactarlo. Días más tarde, en el Congreso, el exsubsecretario le explicó que había salido dos veces con la denunciante, consumieron alcohol, y que no recordaba detalles de lo sucedido. Según Monsalve, ambos mantuvieron conversaciones posteriores sobre el incidente, pero la comunicación se interrumpió cuando la mujer dejó de responder. Finalmente, el caso sigue siendo investigado por la Fiscalía, mientras surgen nuevas aristas sobre los hechos y las reacciones dentro del Gobierno tras conocerse la denuncia.
En medio de las especulaciones sobre un inminente cambio de gabinete, el gobierno reafirmó su “total y absoluto respaldo” a la ministra del Interior, Carolina Tohá, para continuar liderando la cartera en medio de los desafíos de seguridad que enfrenta el país. La portavoz del Ejecutivo, Camila Vallejo, enfatizó la confianza del Presidente Gabriel Boric en Tohá, señalando que su gestión es clave para coordinar esfuerzos con las policías, el Ministerio Público y otras instituciones en la lucha contra la inseguridad, el crimen organizado y el narcotráfico en los barrios. Lo que yo puedo reafirmar es algo que ha dicho el Presidente de la República, que nuestra ministra del Interior y el equipo de gobierno cuentan con total y absoluto respaldo para las tareas que el mismo Presidente ha encomendado en torno a trabajar por la principal preocupación de los chilenos y chilenas, que es la agenda de seguridad, indicó Vallejo. Este apoyo explícito a Tohá surge en un contexto de cuestionamientos y críticas debido a su papel en el caso del exsubsecretario del Interior, Manuel Monsalve, lo que ha generado dudas sobre su continuidad en el ministerio. Sin embargo, Vallejo recalcó que el Ministerio del Interior debe estar “plenamente operativo y funcionando” para enfrentar los problemas de seguridad que afectan a la ciudadanía. Además, la vocera hizo una dura crítica al enfoque que ha tomado el debate sobre este caso, señalando que se ha centrado en la responsabilidad de Tohá y su par de la Mujer, Antonia Orellana, en lugar de atender a la protección de las víctimas.Es impresionante cómo ante la denuncia de violación contra un exsubsecretario termina siendo el foco de atención y de responsabilidad dos ministras mujeres, afirmó Vallejo, subrayando que el verdadero enfoque debería estar en el apoyo a las víctimas y en asegurar que la justicia actúe con rigurosidad y a tiempo. Finalmente, el gobierno, de esta manera, busca cerrar filas en torno a Tohá en la antesala de posibles ajustes ministeriales, reafirmando su compromiso con la agenda de seguridad y la lucha contra el crimen organizado.
En las últimas horas, han surgido nuevos antecedentes en el caso Monsalve que han puesto en entredicho las declaraciones oficiales de la ministra del Interior, Carolina Tohá, respecto a sus comunicaciones con el ex subsecretario Manuel Monsalve. Este último enfrenta una investigación tras una denuncia de delitos de connotación sexual por parte de una funcionaria de la misma cartera. Ante esto, la polémica surgió cuando Canal 13 reveló que Tohá habría advertido a Monsalve sobre la incautación de su teléfono, realizada el 15 de octubre en el Hotel Panamericano. Este dato se conoce luego de que el Presidente Gabriel Boric informara que, al ser comunicado del caso, había instruido a Monsalve a colaborar con la Policía de Investigaciones (PDI) y el Ministerio Público. Asimismo, el Ministerio del Interior emitió un comunicado aclarando que dicha llamada fue solicitada por la PDI y que Tohá no estaba al tanto de los detalles de las diligencias. Sin embargo, esta explicación no ha mitigado las suspicacias, pues tanto las fechas como las comunicaciones previas han despertado cuestionamientos en la opinión pública. Adicionalmente, el medio Ciper informó que la presunta víctima mantuvo una reunión con Monsalve a inicios de octubre, en la que reafirmó que el hecho ocurrido el 22 de septiembre no había sido consensuado. Este evento habría llevado a la funcionaria a solicitar una licencia médica y a tomar acciones legales contra el ex subsecretario. Ahora bien, en el marco de la investigación, el director general de la PDI, Eduardo Cerna, también llamó a retiro a la jefa nacional de Inteligencia, Cristina Vilches, tras confirmarse que ordenó diligencias sobre el caso antes de que se ingresara la denuncia formal. La Fiscalía Centro Norte, dirigida por Xavier Armendáriz, se encuentra ahora evaluando la posibilidad de que se hayan realizado más levantamientos de pruebas de forma irregular, lo cual agrava las dudas sobre la conducta de diversas autoridades en torno al caso. Finalmente, este conflicto ha añadido una tensión significativa al Ministerio del Interior y ha generado inquietudes sobre la gestión y transparencia de la ministra Tohá en uno de los casos más sensibles del Gobierno.
El gobierno de Chile enfrenta una creciente presión en torno a una posible reconfiguración del gabinete, impulsada tanto por sectores del oficialismo como de la oposición. Una de las figuras más cuestionadas es la ministra del Interior, Carolina Tohá, quien hasta hace poco sonaba como una de las cartas presidenciales del oficialismo, pero que ha sido blanco de críticas por la gestión de la reciente salida de Manuel Monsalve y las presuntas irregularidades en su cartera. Ante esto, consultada sobre la fecha de un eventual cambio de gabinete, Tohá fue categórica: “Solo el Presidente de la República puede responder esa pregunta; todo lo demás es música, y mala música. No vale la pena que digamos cosas porque solo él puede responder esa pregunta”. Asimismo, descartó que tenga intención de dejar su cargo para disputar una elección, comentando que “si yo tuviera intenciones de salir, habría salido”. Asimismo, la vocera de Gobierno, Camila Vallejo, abordó también el tema, recordando que la normativa exige que ministros y subsecretarios que quieran postularse al Congreso deben renunciar al menos un año antes de las elecciones. Este plazo vence en noviembre de este año. “Si hay autoridades que los partidos definan como posibles candidatos o candidatas al Parlamento, deben señalarse antes de esa fecha para hacer los ajustes correspondientes”, explicó Vallejo, y aclaró que este proceso se hará “independientemente de la evaluación que el Presidente tenga sobre su desempeño”. Finalmente, la presión por un cambio en el gabinete se incrementa en el contexto de las crisis internas que han afectado a La Moneda, donde la salida de Monsalve ha generado tensiones y cuestionamientos en torno a la dirección del gobierno en la recta final de este año.
Este miércoles, las diputadas de Chile Vamos, Camila Flores (RN), Paula Labra (RN) y Flor Weisse (UDI) antepusieron una querella criminal en contra del exsubsecretario Manuel Monsalve por el delito de secuestro agravado y Carolina Tohá, ministra del Interior, por obstrucción a la justicia, infracción a la Ley de Inteligencia y omisión de denuncia. Específicamente, las congresistas busca que se investiguen las responsabilidades penales y administrativas por hechos de extrema gravedad que “afectan la credibilidad” de las instituciones públicas. Ello, en el marco del denominado Caso Monsalve. En la acción judicial, las parlamentarias aseveran que los antecedentes conocidos “revisten de gravedad y deben ser investigadas exhaustivamente, porque infringen no solo normas de la Ley de Inteligencia, sino que constituyen actos que pueden haber modificado pruebas”. Siguiendo esa línea, Camila Flores indicó que solicitan que se configure el delito de secuestro agravado contra el ''exzar de la Seguridad'', “porque ha sido retenida una víctima y el producto de esa retención, precisamente, ha existido una presunción de delito de violación que se está investigando”, subrayó. En tanto, Paula Labra comentó que la querella criminal surgió luego que constaran “que hubo un pacto de silencio” entre las autoridades de Gobierno. “Estamos hablando de un exsubsecretario del Interior, una persona poderosa que utilizó sus redes propias del cargo para encubrir el caso. Por eso, con firme convicción, hemos tomado la decisión de querellarnos por secuestro agravado, porque la víctima fue retenida contra su voluntad. Monsalve debe pagar por todos sus actos, por justicia y honor a la víctima”, fustigó. De acuerdo a Flor Weisse, los hechos que se han conocido dan cuenta de un “circo romano, donde se ha hecho un guión, una trama por parte de La Moneda”. “En esta querella se suma la omisión de denuncia, toda vez que la ministra del Interior también tenía la obligación, como cualquier funcionario público, de poner y denunciar los hechos de los cuales tomó conocimiento de manera inmediata”, profundizó. Sumado a lo anterior, el texto detalla que Tohá habría mantenido comunicaciones con Monsalve en momentos críticos del proceso, lo que podría haber interferido en la calidad reservada de la investigación. Con todo, en base a lo expuesto en el documento, se deberá determinar si “este llamado realizado por la ministra Tohá a Monsalve, antes de realizarse el allanamiento, fue la alerta suficiente para que el querellado procediera al cambio del chip de su teléfono celular, constituyendo un hecho relevante en la investigación del delito de obstrucción a la investigación”.
Este lunes se dio a conocer la declaración completa de la ministra del Interior, Carolina Tohá, en el marco del Caso Monsalve, que investiga denuncias de abuso sexual y violación contra el exsubsecretario de la cartera. Según el testimonio entregado a la Fiscalía, Tohá señaló que supo de la denuncia por parte del inspector general de la PDI, Eduardo Cerna, el martes 15 de octubre, un día después de que la querella fuera ingresada. El señor Cerna me dijo que tenía una mala noticia: existía una denuncia contra el subsecretario por abuso y violación, afirmó Tohá. La ministra también explicó que la PDI, durante la investigación, detectó que el subsecretario había solicitado previamente una revisión de las cámaras del hotel, aduciendo que tenía12 horas borradas en su memoria. Según Monsalve, durante ese lapso estuvo acompañado de una funcionaria de la subsecretaría del Interior, luego de haber consumido alcohol juntos. Tras enterarse de los hechos, Tohá informó al Presidente Gabriel Boric, quien, según su relato, se mostróimpresionado y sorprendido. Fue entonces cuando el mandatario instruyó al subsecretario viajar a Concepción para discutir la situación con su familia, aunque Tohá aclaró que desconocía ese viaje hasta mucho después. Ante esto, la ministra intentó comunicarse con Monsalve el miércoles 16 de octubre, pero no logró contactarlo. Días más tarde, en el Congreso, el exsubsecretario le explicó que había salido dos veces con la denunciante, consumieron alcohol, y que no recordaba detalles de lo sucedido. Según Monsalve, ambos mantuvieron conversaciones posteriores sobre el incidente, pero la comunicación se interrumpió cuando la mujer dejó de responder. Finalmente, el caso sigue siendo investigado por la Fiscalía, mientras surgen nuevas aristas sobre los hechos y las reacciones dentro del Gobierno tras conocerse la denuncia.
En medio de las especulaciones sobre un inminente cambio de gabinete, el gobierno reafirmó su “total y absoluto respaldo” a la ministra del Interior, Carolina Tohá, para continuar liderando la cartera en medio de los desafíos de seguridad que enfrenta el país. La portavoz del Ejecutivo, Camila Vallejo, enfatizó la confianza del Presidente Gabriel Boric en Tohá, señalando que su gestión es clave para coordinar esfuerzos con las policías, el Ministerio Público y otras instituciones en la lucha contra la inseguridad, el crimen organizado y el narcotráfico en los barrios. Lo que yo puedo reafirmar es algo que ha dicho el Presidente de la República, que nuestra ministra del Interior y el equipo de gobierno cuentan con total y absoluto respaldo para las tareas que el mismo Presidente ha encomendado en torno a trabajar por la principal preocupación de los chilenos y chilenas, que es la agenda de seguridad, indicó Vallejo. Este apoyo explícito a Tohá surge en un contexto de cuestionamientos y críticas debido a su papel en el caso del exsubsecretario del Interior, Manuel Monsalve, lo que ha generado dudas sobre su continuidad en el ministerio. Sin embargo, Vallejo recalcó que el Ministerio del Interior debe estar “plenamente operativo y funcionando” para enfrentar los problemas de seguridad que afectan a la ciudadanía. Además, la vocera hizo una dura crítica al enfoque que ha tomado el debate sobre este caso, señalando que se ha centrado en la responsabilidad de Tohá y su par de la Mujer, Antonia Orellana, en lugar de atender a la protección de las víctimas.Es impresionante cómo ante la denuncia de violación contra un exsubsecretario termina siendo el foco de atención y de responsabilidad dos ministras mujeres, afirmó Vallejo, subrayando que el verdadero enfoque debería estar en el apoyo a las víctimas y en asegurar que la justicia actúe con rigurosidad y a tiempo. Finalmente, el gobierno, de esta manera, busca cerrar filas en torno a Tohá en la antesala de posibles ajustes ministeriales, reafirmando su compromiso con la agenda de seguridad y la lucha contra el crimen organizado.
En las últimas horas, han surgido nuevos antecedentes en el caso Monsalve que han puesto en entredicho las declaraciones oficiales de la ministra del Interior, Carolina Tohá, respecto a sus comunicaciones con el ex subsecretario Manuel Monsalve. Este último enfrenta una investigación tras una denuncia de delitos de connotación sexual por parte de una funcionaria de la misma cartera. Ante esto, la polémica surgió cuando Canal 13 reveló que Tohá habría advertido a Monsalve sobre la incautación de su teléfono, realizada el 15 de octubre en el Hotel Panamericano. Este dato se conoce luego de que el Presidente Gabriel Boric informara que, al ser comunicado del caso, había instruido a Monsalve a colaborar con la Policía de Investigaciones (PDI) y el Ministerio Público. Asimismo, el Ministerio del Interior emitió un comunicado aclarando que dicha llamada fue solicitada por la PDI y que Tohá no estaba al tanto de los detalles de las diligencias. Sin embargo, esta explicación no ha mitigado las suspicacias, pues tanto las fechas como las comunicaciones previas han despertado cuestionamientos en la opinión pública. Adicionalmente, el medio Ciper informó que la presunta víctima mantuvo una reunión con Monsalve a inicios de octubre, en la que reafirmó que el hecho ocurrido el 22 de septiembre no había sido consensuado. Este evento habría llevado a la funcionaria a solicitar una licencia médica y a tomar acciones legales contra el ex subsecretario. Ahora bien, en el marco de la investigación, el director general de la PDI, Eduardo Cerna, también llamó a retiro a la jefa nacional de Inteligencia, Cristina Vilches, tras confirmarse que ordenó diligencias sobre el caso antes de que se ingresara la denuncia formal. La Fiscalía Centro Norte, dirigida por Xavier Armendáriz, se encuentra ahora evaluando la posibilidad de que se hayan realizado más levantamientos de pruebas de forma irregular, lo cual agrava las dudas sobre la conducta de diversas autoridades en torno al caso. Finalmente, este conflicto ha añadido una tensión significativa al Ministerio del Interior y ha generado inquietudes sobre la gestión y transparencia de la ministra Tohá en uno de los casos más sensibles del Gobierno.
El gobierno de Chile enfrenta una creciente presión en torno a una posible reconfiguración del gabinete, impulsada tanto por sectores del oficialismo como de la oposición. Una de las figuras más cuestionadas es la ministra del Interior, Carolina Tohá, quien hasta hace poco sonaba como una de las cartas presidenciales del oficialismo, pero que ha sido blanco de críticas por la gestión de la reciente salida de Manuel Monsalve y las presuntas irregularidades en su cartera. Ante esto, consultada sobre la fecha de un eventual cambio de gabinete, Tohá fue categórica: “Solo el Presidente de la República puede responder esa pregunta; todo lo demás es música, y mala música. No vale la pena que digamos cosas porque solo él puede responder esa pregunta”. Asimismo, descartó que tenga intención de dejar su cargo para disputar una elección, comentando que “si yo tuviera intenciones de salir, habría salido”. Asimismo, la vocera de Gobierno, Camila Vallejo, abordó también el tema, recordando que la normativa exige que ministros y subsecretarios que quieran postularse al Congreso deben renunciar al menos un año antes de las elecciones. Este plazo vence en noviembre de este año. “Si hay autoridades que los partidos definan como posibles candidatos o candidatas al Parlamento, deben señalarse antes de esa fecha para hacer los ajustes correspondientes”, explicó Vallejo, y aclaró que este proceso se hará “independientemente de la evaluación que el Presidente tenga sobre su desempeño”. Finalmente, la presión por un cambio en el gabinete se incrementa en el contexto de las crisis internas que han afectado a La Moneda, donde la salida de Monsalve ha generado tensiones y cuestionamientos en torno a la dirección del gobierno en la recta final de este año.